Que
tengas un buen viaje;
allí
donde vas uno nunca pierde el tren,
nadie
siente que se le pasará el arroz
y
el tiempo nunca pesará sobre el cuerpo
como
rocas de iridio.
En la tierra los trayectos son cortos y largos
todo
depende de la velocidad del parpadeo,
esa oscilación -siempre accidental-
entre sombra y luz.
esa oscilación -siempre accidental-
entre sombra y luz.
Buen
viaje.
Si
Platón tuviese razón,
hoy
serías enteramente alma;
estarías
dónde tienes que estar
y
mi ser no quebraría
buscando,
con todas sus ganas,
el
infame mundo inteligible.
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